Montones de juguetes por todos lados, útiles escolares esparcidos en el escritorio y ropa sucia en el piso… ¿te suena familiar? Sin importar la edad que tengan, los niños son especialistas en desordenar una habitación en minutos. Sigue estos prácticos consejos para que su habitación no parezca un campo de batalla y convierte la labor de limpieza en algo divertido.

Organizando todo

• Empecemos por revisar todos los juguetes, peluches, ropa o libros  que tengan nuestros niños. Separa los juguetes que aún utilizan, los que ya no usan pero están en buen estado y otro con los rotos o maltratados. Invita a tus hijos a llevar los juguetes que aún sirven a un centro de beneficencia. Hazles sentir que están haciendo algo bueno por los demás y al mismo tiempo están limpiando su habitación.
• Una opción muy novedosa son estas cajas plásticas con rueditas. Además de ser muy prácticas y resistentes, a los niños les divierte usarlas y son fáciles de transportar de un espacio a otro.

• Busca muebles donde tus niños puedan tener a su alcance sus juguetes favoritos. Un buen ejemplo son los organizadores de cubo, que son perfectos para ellos, ya que se colocan en el suelo y su altura es apta para los pequeños. Ademas tienes la opción de colocar la cantidad de cajones que veas necesario, por lo que sirven tanto para organizar como para decorar.

• Otra excelente opción son los organizadores con contenedores, que te permitirán tener las cosas de los niños a la vista y organizadas. Podrás saber inmediatamente donde está un juguete sin tener que abrir y cerrar cajones buscándolo.

• Si aún así notas que las paredes se siguen viendo muy solas, no hay mejor solución que los stickers decorativos de vinil. Busca las figuras que más le gusten a tus niños y pégalas.

• Dale color a la habitación de tus niños con un lindo tapete de colores, ideal para que en este espacio se dediquen a jugar y a divertirse.

• Siéntete orgullosa de los dibujos que hacen tus pequeños. Para ellos significará mucho que cuelgues sus creaciones en algún tablero de corcho y que estén a la vista de quien entre en la habitación.
• Dile adiós a la ropa sucia en el suelo y enséñales a colocarla dentro de un cesto especial; demuéstrales que pueden ser muy limpios si se lo proponen.  Además, si tus pequeños tienen más peluches y ya no sabes dónde ponerlos, puedes comprar un cesto adicional de diferente color y guardarlos ahí.

No olvides que entre más divertida hagas la labor de limpieza y organización, más rápido se acostumbrarán a hacerlo ellos mismos. Sé creativa y comparte tiempo con tus hijos.

Acude a tu The Home Depot más cercano en compañía de tus pequeños y permite que se sientan parte importante de la decoración y organización de su propio cuarto opinando y escogiendo los colores que más les gustan. Seguramente se sentirán muy cómodos sabiendo que ellos ayudaron crear una habitación bonita y ordenada.