Mantener ordenada la casa puede parecer un reto si tenemos pocos metros cuadrados, sin embargo, usando los artículos correctos y tomando en cuenta algunos tips de organización, podremos aprovechar mejor los huecos y las esquinas que tenemos libres en las habitaciones.
Uno de los elementos más prácticos, funcionales y cómodos que hay para optimizar el espacio y contribuir a la decoración son las cajas organizadoras. Tienen la ventaja de estar fabricadas en distintos tamaños, diseños y materiales, para que puedan adaptarse a los diferentes usos y necesidades.
Resultan muy útiles para localizar los objetos con facilidad y para conseguir lugares más abiertos y limpios. Por ello, a continuación, compartiremos algunos consejos para mantener en orden los diferentes espacios con ayuda de estos originales organizadores.
¿Cómo ordenar con cajas organizadoras?
1. Para organizar otros cajones
Puede parecer irónico meter cajas organizadoras en cajones, pero es muy práctico cuando necesitamos ordenar pequeños accesorios o complementos, para evitar que se dañen o enreden entre sí. En este caso, una buena opción es incorporar al menos 2 organizadores de plástico de tamaño reducido en las cajoneras del dormitorio, para así acomodar cinturones, gafas de sol, collares y aretes, o incluso ropa interior.
2. Como zapatero
Si no queremos agregar otro mueble en el dormitorio, entonces las cajas organizadoras también nos funcionarán como zapateros. Podemos usar una caja de plástico grande para almacenarlos ahí y posteriormente guardarla en el clóset o en alguna esquina en donde no bloquee el tránsito. Para que luzca más discreta, podemos optar por una caja en color negro y con tapa, ya que esto mantendrá el interior libre de humedad, polvo e insectos.
Ahora bien, si preferimos opciones más estéticas, otra alternativa es usar una torre de plástico con 3 cajoneras. Hay versiones blancas y transparentes y otras con un efecto tipo tejido que les da un aspecto más natural y hogareño. La ventaja de esta última es que mantiene oculto el contenido, por lo que la habitación lucirá más limpia y ordenada.
3. Para almacenar debajo de la cama
En ocasiones, el espacio debajo de la cama es poco aprovechado, sin embargo, las cajas organizadoras pueden hacerlo bastante funcional. Hay cajas de colores bajas y alargadas en las que podemos almacenar pijamas, sábanas o incluso toallas pequeñas, e introducirlas en ese lugar. Así, en caso de necesitar reemplazo de blancos solo jalamos la caja y tendremos a disposición nuestros artículos. Cuando el uso es poco, siempre hay que recurrir a modelos con tapa para garantizar la higiene al interior.
4. En las estanterías
Las estanterías son otro buen lugar para colocar cajas organizadoras, que permiten aprovechar mejor el espacio y sin riesgo de que nuestros objetos caigan. Sin embargo, dado que son elementos que quedan a la vista, lo mejor es conseguir diseños atractivos y que se conjuguen armónicamente con el ambiente.
Tal es el caso de las gavetas tipo mimbre trenzado, en las que podemos guardar variedad de artículos, como películas y libros, si la estantería está ubicada en la sala, o incluso la lencería o complementos del arreglo personal, si está en el dormitorio. Si queremos un toque más femenino, también hay gavetas que tienen una franja de tela en la parte superior.
5. Para la ropa sucia
Nadie quiere tener la ropa sucia por toda la casa, así que una caja o gaveta también será la solución para este problema. Podemos incorporar una en el dormitorio y otra en el cuarto de lavado para agilizar el proceso de recolección. Si, además, nos gusta separar la ropa de color, blanca y negra, para conservarla en mejor estado, entonces también podemos incorporar cajas en distintos colores y tamaños para clasificarla.
Las cajas grandes y altas aportarán mayor capacidad de almacenamiento si tenemos varios integrantes en la casa. De lo contrario, podemos seleccionar gavetas más estéticas y discretas para dividir la ropa. Para una decoración más sobria, una caja de plástico gris será la indicada, al igual que una caja de tela color chocolate.
6. ¿Y los juguetes?
El dormitorio de los niños es un espacio que requiere la máxima organización para evitar accidentes y fomentar hábitos de limpieza. Y para ello, las cajas organizadoras de tela son grandes aliadas. Algunas vienen con la palabra “Toys” incluida para que rápidamente identifiquen que ahí deben ir sus peluches, carritos o muñecas. También hay diseños que incorporan dibujos de unicornios, u otras más simples con un tono uniforme. Aquí lo mejor sería elegir sus colores favoritos y marcar cada caja con un plumín para que sepan qué deben guardar en ese lugar.
Por ejemplo, mientras una puede ser para sus juguetes, otra puede usarse para su ropa interior, otra para sus zapatos e incluso otra para sus artículos escolares, como colores, tijeras, etc. Lo mejor es que muchas de estas cajas pueden apilarse para facilitar la organización o quedan perfectas dentro de muebles organizadores en forma de cubo. Además, la mayoría tienen asas para jalarlas y son bastante ligeras, haciendo más práctica su manipulación.
7. Productos de baño y de limpieza
El baño también requiere la máxima organización si queremos evitar accidentes y hacer más cómodo y relajante el tiempo que dedicamos al arreglo personal. Así que los organizadores de plástico nos permitirán acomodar tanto en el tocador, como en las puertas, repisas y cajones disponibles, artículos como maquillaje, cepillos de dientes, productos de estilizado, perfumes, así como accesorios para el cabello.
Una opción elegante, resistente y duradera, como ya se ha mencionado, son las gavetas tejidas. Si la habitación tiene una decoración luminosa y abierta, un diseño en color café claro o, por el contrario, en un tono oscuro, resaltarán sin igual.
Si nos gustan los diseños más minimalistas, también hay cajones blancos hechos de metal, que incluso se pueden instalar al interior de la regadera para organizar champú y jabones. De lo contrario, quedan bien afuera para guardar toallas, gorras de baño, o cualquier otro artículo.
Y si el baño también se ha convertido en almacén de productos de limpieza, entonces una caja de plástico transparente nos permitirá tenerlos bien protegidos y fuera del alcance de los pequeños, ya sea debajo de la tarja o en alguna repisa alta.
8. En el taller o garaje
Tener herramientas manuales y eléctricas es esencial para hacer reparaciones o montajes en el hogar, pero también es necesario mantenerlas protegidas para evitar accidentes y extender su vida útil. Afortunadamente, hay organizadores de plástico de uso rudo que fácilmente resisten objetos muy pesados, como taladros y martillos, y que incluyen ruedas para facilitar su movilidad.
Por otro lado, existen algunos diseños que incorporan varios niveles al interior y pequeños compartimentos para guardar todo tipo de tuercas y tornillos, así como desarmadores, lijas, pegamentos, entre otros.
Y si también somos amantes de las manualidades, como tejido a gancho, bordado o bisutería, de igual modo están disponibles los organizadores de plásticos para objetos muy pequeños, que además incluyen ranuras para hacer las divisiones. Aquí podemos guardar lentejuelas, botones, hilos, agujas, listones, cuentas o chaquiras, entre otros para echar a volar nuestra imaginación.
9. Para organizar armarios y espacios generales
Finalmente, para esos lugares donde queremos una imagen delicada, como los armarios, los libreros o incluso debajo de las mesas de centro, las cajas de tela plegable entregan una apariencia íntima y elegante. Algunos diseños tienen ventana para identificar lo que hay dentro, siendo muy conveniente para ropa de cama, cinturones, pañoletas o bufandas, etc., mientras que hay otros en forma de cubo y con tapa, que tienen un estampado sutil y moderno perfecto para guardar revistas, controles de televisor, entre otros.
Y queremos añadir este tipo de detalles en la cocina, entonces podemos usar versiones más desenfadadas, como una gaveta hecha de fibra de papel y el interior de poliéster para almacenar algunos productos de la despensa (latas, frascos, etc.), o incluso algunas palas y cucharas que usamos frecuentemente para guisar.
Tal como vemos, son muchas las opciones que tenemos para jugar con cajas organizadoras. De hecho, también hay carros de plástico con cajones que podemos poner en el baño o en el cuarto de lavado, para guardar productos de limpieza o aseo personal que compramos anticipadamente (papel de baño, detergentes, jabones, pastas de dientes).
Solo hay que ponernos creativos y aprovechar todos los diseños que están disponibles para crear hogares más acogedores y organizados.