Las cortinas no son solo un artículo que se pueda usar en salas y dormitorios, también cumplen un lugar importante en la decoración de cocinas. Ayudan a mantener la privacidad y a controlar muy bien la entrada de luz natural y aire, haciendo más cómoda y segura la preparación de alimentos. Además, son muchas las ideas de cortinas para cocina que actualmente podemos encontrar, las cuales harán que este espacio tan concurrido se sienta placentero.

Para que la elección sea más sencilla, acá entregamos una lista de ideas de cortinas que le darán mucha personalidad y que marcarán aún más el estilo de nuestro hogar.

7 ideas de cortinas para cocina

Antes de comenzar es importante recalcar que las cortinas para cocina deben ser resistentes al humo, a la grasa, a la humedad y la suciedad en general, además de ser sumamente higiénicas y fáciles de limpiar. Por lo que es preciso prestar atención al tipo de tela que se va a usar.

Una vez considerado esto, es momento de seleccionar la más conveniente para nosotros.

1. Cortinas traslúcidas o visillos

Si lo que buscamos es tener suficiente iluminación sin tener que abrir la cortina, entonces necesitamos un modelo traslúcido. A este tipo de cortinas se les conoce como visillos, que están fabricados con tela súper fina y trasparente para filtrar la luz del sol. Además, si tenemos la ventana abierta permitirá que el aire fluya sin complicaciones, deshaciéndose de malos olores.

Entre las opciones están las cortinas que se instalan con argollas, mientras que también hay versiones enrollables para subir y bajar la cortina cómodamente. Generalmente, están elaboradas con telas como algodón, lino o poliéster, al ser las que mejor favorecen el paso de la luz.

2 Cortinas romanas

Las cortinas romanas también tienen un sistema enrollable, pero con una notoria diferencia en el diseño. La tela está dividida por paneles, lo que permite elevar la cortina hasta la altura deseada y dejar a la vista sutiles líneas en la superficie. Es una combinación entre lo clásico y lo contemporáneo, llegando incluso a ser una excelente opción para quienes buscan estilos minimalistas, gracias a su simplicidad.

Actualmente, las encontramos en distintas texturas y colores. Las más comunes son las blancas, pero también hay en tonos beiges o café que crean una ambiente de mayor calidez. También filtran el paso de la luz, aunque su opacidad es ligeramente mayor que las traslúcidas.

3. Malla solar

Si nuestra ventana recibe los rayos directos del día y queremos proteger los muebles de la cocina, la solución es adquirir una malla solar. Estas cortinas son muy prácticas, ya que posibilitan la vista hacia el exterior, pero sin que los rayos UV afecten al interior. Esto es sumamente útil cuando el sol se posa en la estufa o en alguna área donde se almacenan alimentos, dado que evita que se calienten y se acelere el proceso de descomposición.

Generalmente, las hay en color blanco o marfil, y tienen un diseño recto y liso, lo que facilita la combinación con estilos rústicos o japandi, que mezclan lo natural con lo moderno. Los principales materiales son el PVC y el poliéster, lo que aumenta su resistencia al sol y evita que, en caso de incendio, la cortina se consuma rápido.

4. Persiana horizontal

También se les conocen como cortinas venecianas. Se distinguen por tener lamas o tabletas y una correa que permite modular tanto la altura de la persiana como la apertura u orientación de las tabletas. Así, según nuestra preferencia, podremos tener más o menos luz como queramos.

En cuanto a los materiales, este tipo de cortinas también las encontramos en PVC, papel plisado y aluminio. Las tres aportan excelente durabilidad y ligereza, aunque la última ofrece un mayor aislamiento térmico y de ruido, y da la posibilidad de incorporar un sistema motorizado para optimizar su apertura. Además, por el acabado, quedan bien en cocinas con estilos más arriesgados, como en color negro o rojo, y son más rápidas de limpiar.

Para jugar un poco más con la decoración, y aumentar la privacidad en la cocina, podemos combinar una persiana de papel plisado con una cortina de tela un poco más gruesa, como de lino, o con un visillo en tono rosado o violeta, que le dé un toque delicado y femenino. También está la opción de elegir persianas en PVC estilo madera para crear un ambiente más cálido y natural.

5. Cortinas opacas

Si queremos mayor protección y privacidad para nuestra cocina, entonces una cortina opaca de poliéster es la opción. Este tipo de cortinas, semejantes a las traslúcidas, aíslan el ruido, reducen el paso de la luz y nublan la vista hacia el interior, aportando un estilo muy relajado, fresco y natural.

Esto ayuda a que la cocina esté a una temperatura más equilibrada, muy benéfico para alimentos como la fruta y la verdura, y a ahorrar en sistemas de aire acondicionado. Además también tiene un diseño uniforme, que contrasta perfecto con colores más vivos en la habitación, y su mecanismo de apertura es corredizo.

Estos pueden servir como paneles provisionales si estamos en remodelación o nos estamos mudando a un nuevo hogar, de lo contrario, también hay persianas que pueden cumplir esta función. La principal ventaja es que son fáciles de instalar, lo que significa que no son necesarios los tornillos ni soportes.

Ahora bien, si preferimos algo más clásico, también podemos optar por cortinas Jacquard. Esta tela reduce significativamente las entradas de luz, es resistente a las arrugas y, además, aporta mucha personalidad.

6. Cortinas doble entrada

Para decoraciones más románticas o vintage, las cortinas de doble entrada son otra buena alternativa. Estas se abren hacia los costados, pudiéndose sujetar con un listo a manera de moño, lo que le da un toque muy femenino. Aunque generalmente se ocupan en la sala, también son perfectas para la cocina, especialmente si mantenemos un estilo cálido y campirano. Algunos diseños vienen en algodón, ideal para agilizar la limpieza.

7. Black out

Si al final lo que buscamos es un bloqueo total de la ventana, especialmente cuando estamos fuera de casa, entonces los paneles blackout son la solución. Son bastante comunes en dormitorios, pero en las cocinas también alcanzan popularidad, ya que les brinda una imagen de sencillez y elegancia. Estas se destacan por impedir el paso de la luz por completo. Algunos modelos incluyen un panel screen para jugar con el paso de la iluminación sin abrir toda la ventana.

Ahora bien, si preferimos una versión más flexible, también hay cortinas blackout. La tela es la misma, por lo que mantienen la cocina fresca en verano y cálida en invierno. En cuanto al diseño, este es más variado; algunos tienen patrones, mientras que otros un acabado desgastado. La ventaja es que tanto los paneles como las cortinas blackout tienen alta resistencia a la humedad y al calor, por lo que se mantendrán en buen estado por largo tiempo.

¿Qué considerar al comprar cortinas para cocina?

Colores neutros

Si bien las cortinas con colores vibrantes también son una buena alternativa para hacer más llamativa la cocina, incorporar diseños más sobrios facilita la combinación con todos los estilos y permite remodelar cuantas veces queramos. Así que los colores neutros, como el café, el beige y blanco, serán grandes aliados.

Medidas

Asimismo, es fundamental medir muy bien la ventana antes de adquirir una cortina. Generalmente, son más pequeñas que en el resto de la casa, por eso mismo se vuelve fundamental corroborar bien el tamaño, para revisar cuánto se le tiene que cortar.

Muebles y decoración

Finalmente, no debemos pasar por alto el estilo que deseamos crear, por lo que habrá que considerar los muebles y los objetos decorativos que se están incorporando. Ya sea que queramos una cocina más moderna, más rústica o más tradicional, encontraremos modelos perfectos que complementarán el ambiente. Como ya vimos, hay persianas que asemejan la madera y otras que tienen acabados más naturales y ligeros.

Con estas ideas de cortinas para la cocina es momento de darle un nuevo giro a nuestros ambientes y buscar opciones que sean estéticas y funcionales.