Los diseños de pared no son un aspecto trivial en la decoración, al contrario, marca la pauta para el tipo de ambiente que queremos crear. Los colores y formas influyen en el estado de ánimo de las personas y son el primer paso para la creación de un estilo único.
Sin embargo, para lograr resultados profesionales es importante que te des el tiempo para realizar esta tarea, pues requerirás paciencia y dedicación para lograr la decoración que estás buscando.
Para facilitarte el proceso, te compartimos algunos diseños de pared para tu hogar, los cuales te ayudarán a destacar lo mejor de cada habitación.
¿Qué considerar antes de iniciar con el diseño de paredes?
Si bien, la decoración de paredes puede ser una tarea divertida, hacerlo impulsivamente puede provocar que después te arrepientas. Para evitarlo, toma en cuenta los siguientes factores.
No te enfoques solo en las tendencias
A pesar de que las tendencias pueden ser atractivas, lo mejor es no basar nuestra decisión solo en ellas. Al ser modas temporales corres el riesgo de que en el futuro quieras cambiarla, lo cual genera un mayor desgaste físico y pérdida económica.
Como recomendación, piensa en los estilos que más te gustan, tus colores favoritos y en el ambiente que quieres transmitir, ya que esto te ayudará a crear espacios personalizados. Una vez considerado esto, puedes elegir algún aspecto que te guste de las tendencias actuales para complementar el diseño.
Características de la estancia
Para poder elegir el diseño de paredes, primero tienes que considerar las características de la habitación. Por ejemplo, si el espacio es amplio o pequeño, o si tiene pocas entradas de luz. También habrá que tomar en cuenta el color y diseño de los muebles para encontrar tonalidades que armonicen con el resto de la decoración.
Función de la habitación
En cada habitación realizas actividades diferentes, por lo que el diseño debe ayudar a crear la atmósfera que necesitas. Los dormitorios están hechos para dormir y descansar, por lo que habrá que buscar alguna decoración que brinde tranquilidad, mientras que en la cocina necesitamos diseños que estimulen los sentidos y nos mantengan activos.
Busca el equilibrio
No quieras saturar las paredes, como ya se mencionó, busca un diseño que vaya acorde con el resto de la estancia y que unifique la decoración. Lo anterior no tiene que ver con elegir colores intensos o neutros, sino con seleccionar los necesarios para que los espacios estén equilibrados.
Por ejemplo, si tienes muebles sencillos y con colores lisos, puedes apostar por paredes con patrones o figuras, mientras que, si tienes artículos con muchos detalles y tonalidades vibrantes, lo mejor será inclinarte por paredes en color neutro.
Además, tomar en cuenta lo anterior te servirá para poder jugar con el estilo de tus habitaciones en cualquier momento y sin necesidad de pintar nuevamente. Podrás hacerlo cambiando únicamente las alfombras, cojines, o cortinas.
Diseños de pared para tu hogar
Ahora que conoces los factores que debes tomar en cuenta antes de iniciar, puedes poner a volar tu imaginación.
Recámara
Una alternativa para pintar tu recámara es hacer énfasis en la pared que está detrás de tu cama. Sin duda, este es el mueble principal de la habitación, por lo que debe destacar.
Elementos tridimensionales: pinta la pared de tu color favorito —será la base del diseño— y encima coloca mariposas, aves o cualquier otro elemento que sobresalga. No necesitas cubrir toda la pared, es suficiente con que estén justo arriba de tu cama.
Papel tapiz: también se coloca detrás de tu cama para crear un respaldo. Puede ser un diseño de animal print, algún patrón o figuras geométricas. También puedes optar por frases en distinta caligrafía.
Respaldo en forma de arcoíris: para la habitación de los niños puedes crear semicírculos detrás de la cama, para crear la forma de un arcoíris. Solo necesitas 3 colores y cuidar que el diseño salga del ancho de la cama. Si quieres algo más sobrio, elige un color en tres tonalidades diferentes.
Fondo de madera: otra opción es que tu pared tenga un acabado tipo madera. Puede ser estilo tablón en color café o gris para darle un toque rústico a la habitación. Para el resto de las paredes, la mejor elección es el color blanco.
Sala
La sala es un lugar de esparcimiento, relajación y comodidad, por lo que hay que incorporar un diseño de pared que aporte calidez.
Colores neutros: para no saturar el espacio y cansar la vista, una opción son los colores neutros, como el gris, el beige, blanco o distintos tonos de café. Además, al utilizarlos tendrás la oportunidad de agregar colores más intensos —amarillo, azul o rojo— en los artículos y muebles.
Patrones: si no quieres colores lisos, otra alternativa son los patrones sencillos. Elige alguno que tenga un fondo neutro y líneas simples en color blanco para una decoración sobria y elegante. También puedes inclinarte por tonalidades claras en azul o lila, si no quieres usar el tradicional café o beige.
Piedra o madera: para espacios modernos, puedes hacer uso de paredes con acabado en piedra o madera. Para no saturar la habitación ni perder luminosidad, aplícalo solo en una pared y en el resto utiliza colores como el beige o blanco. El diseño puede cubrir todo el muro o solo una parte en forma vertical u horizontal.
Baño
Si tu espacio es pequeño, lo mejor es que no lo satures con colores y patrones.
Bloques: para usar más de un color, puedes dividir tus paredes en dos bloques. La parte de arriba puede ir en tonalidades oscuras de azul o verde y en la parte de abajo un color claro, como el blanco o beige. Además, uno de los bloques puede tener textura visual y el otro ir liso para dar mayor contraste.
Marmoleado: si te gustan los acabados más elegantes, puedes optar por paredes en negro y blanco con diseño marmoleado. Una alternativa es que el color negro vaya en la sección del lavabo, mientras que el blanco en la regadera y el resto de la habitación.
Tradicional: ahora que si quieres un estilo tradicional, hay muros tipo vintage que ofrecen luminosidad. Puedes encontrarlos en color blanco con un acabado esmaltado o tonalidades en beige, que además aportan luminosidad y amplitud a los espacios.
Cocina
La cocina es un espacio donde debe haber vitalidad y energía, ya que es ahí donde hay se puede llegar acumular mucha gente y se llevan a cabo tareas de gran precisión.
Colores vibrantes: ya sea para diseños lisos o patrones, la mejor opción son los colores vibrantes, pues ayudan a dar mayor luminosidad y mantenerte despierto. Puedes utilizar amarillos, naranjas, azules o verdes.
Figuras geométricas: si quieres añadir algo más llamativo, incorpora tapices con formas geométricas, los más comunes son triángulos o rombos. Para no saturar la habitación, escoge solo una pared, puede ser la del lavatrastes y gabinete para que resalte del resto de los muebles.
Madera: aquí también puedes hacer uso de la madera. Creará un ambiente cálido cuando la familia se reúna, en caso de que tu cocina cuente con un antecomedor o una barra. Puedes ponerlo en todas las paredes, con contornos el color blanco o elegir zonas específicas.
Artículos para complementar el diseño de paredes
Además de la mezcla de colores y formas, puedes añadir algunos elementos decorativos para complementar tu trabajo. Pueden ser espejos, cuadros e incluso alguna lámpara. Colócalos arriba de la cama o del sillón para destacar estos muebles. La originalidad dependerá de la forma en que decidas distribuirlos y el diseño de estos.
Con estos diseños de pared para tu hogar podrás hacer de cada habitación un espacio único. No tengas miedo de experimentar y atrévete a hacerlo por ti mismo.