La base de un jardín sano está en la tierra. Ésta debe contar con los nutrientes necesarios para las plantas y, también para el medio ambiente. Tanto el agua como la presencia de insectos y diversos animales le aportan minerales y elementos que la fortalecen, sin embargo, las condiciones actuales hacen que la tierra requiera un poco más de ayuda, la cual está en los fertilizantes.
Las plantas requieren de luz, agua, dióxido de carbono, macronutrientes como hidratos de carbono, proteínas y lípidos, y micronutrientes como agua, sales y ciertas vitaminas, que si la tierra no pudiera proporcionar sería estéril y el suelo perdería su vida.
Los fertilizantes son sustancias compuestas de origen animal, mineral, vegetal o sintético, los cuales contienen una gran cantidad de nutrientes, utilizados para enriquecer y favorecer las características físicas, químicas y biológicas del suelo o sustrato. Los minerales básicos que debe contener el abono por el que te decidas son: nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), estos hacen que tenga las propiedades necesarias para mantener saludable a tu jardín.
Un fertilizante para cada tipo de suelo
Para escoger el que mejor le ofrece beneficios a tu jardín, debes saber que hay diferentes tipos de suelo, cada uno con propiedades y necesidades diferentes:
ARENOSO
Infértil. Estructura pobre y alcalina, por lo que no retiene agua.
Si tu suelo tiene estas propiedades lo mejor es añadir regularmente composta y fertilizantes inorgánicos.
ARENO-ARCILLOSO
Estructura pobre, pero ubérrima.
Un suelo con estas características sólo necesita un poco de fertilizante orgánico y, para su fortalecimiento, un fertilizante químico.
ARCILLOSO
Secado lento, ya que retiene mucha agua. Puede perjudicar o favorecer tu jardín, depende de los diferentes tipos de planta en tu cultivo.
Si añades fertilizante orgánico, composta y un poco de fertilizantes químicos, lograrás tener un suelo muy sano y apto para el crecimiento.
SUBSUELO ÁCIDO
Esta capa del subsuelo es tóxica para algunas plantas
Para este caso el suelo siempre debe estar inundado o por lo menos húmedo. Un tip para esta tierra lo mejor es cosechar plantas que den sombra.
Como ves, el fertilizante es un elemento que permite un desarrollo sano a tu jardín, fortaleciendo y favoreciendo el crecimiento de tus plantas, por lo que se vuelve indispensable su uso, no obstante, el abuso de él también puede perjudicar tu cultivo, ya que el exceso de nitrógeno ocasiona que las plantas crezcan desmedidamente y con tejido frágil, lo que las vuelve más propensas a plagas y enfermedades.
En The Home Depot puedes encontrar una gran variedad de fertilizantes, sólo debes conocer las propiedades de tu suelo y saber qué es lo que quieres plantar. Te invitamos a descubrir cuáles son las mejores plantas que puedes sembrar para esta primavera dependiendo de tu zona geográfica.